lunes, 14 de junio de 2010

Rónald Gamboa

Yo también he escuchado los gemidos de cipreses
hambrientos de paz
y creí dominar al viento

Me subí a lo más alto del peñasco
...para observar al arco iris rebotar contra las montañas
mi padre el viento cobijaba mis pecas

Yo también escuché el silencio de la oscuridad
iluminado por una estrella que nació en mi ventana
cobijado por ella

Aurelia Valentina Dobles

Cada día recibo las palabras susurradas de los árboles, las flores, las hojas, los arbustos, las piedras, las aves, un perro, las libélulas, las gotas, la arena, un musgo, y hasta las despreciados insectos... Siempre he sabido desde tiempos ancestrales que diseñan un lenguaje indescifrado por nosotros aún en cada forma..., movimiento y color y en los conjuntos de ellos hay frases, hay párrafos... Solo sonrío cada día a sus saludos...

Alejandra Valverde Alfaro

Árbol sujeto al encanto. Flor ceniza, libertad. Raíz sin sombra que levita. Tierra, tierra oculta: en tí solo puedo sembrarme, encarnar la presencia del augurio... morir, como hoja que cae y abona la inutilidad de las manos humanas.
Me preguntaron qué le diría a la Tierra hoy... solo pude responder: no hay mar que hable... como cáscara en mi boca, hoy dejé de existir en los almendros...

miércoles, 2 de junio de 2010

La Marcha De Los Árboles / por German Cabrera

-Capítulo Único-

“….y entonces los árboles con sorprendente fuerza alzaron sus raíces de los subsuelos y empezaron su marcha hacia aquel monstruo de metal que asesinaba a sus hermanos y hermanas naturales. Sabían de su potencia a través de sus rugidos y sus nubes de humo vil; pero confiaban en su sabiduría y en la buena ventura prometida por su Madre Verde.

Y así, partían a luchar por su tierra miles de especies de esos reyes del reino vegetal. Fuertes. Sabios. Dadores de Vida Misma! Y en tal momento la tierra retumbó con aquel primer paso de la furia viva de la marcha de los árboles!.......Los humanos, a larga distancia, aún trabajando a toda máquina, se quedaron inmóviles del susto. No sabían que les esperaba…Muerte…eso les esperaba…” – contaba mi padre refiriéndose al hecho.

Fue en el año 2010 cuando sucedió la historia que había dado vuelta al mundo: “En Costa Rica, Los Árboles Toman Vida y Luchan Contra Maquinarias Mineras”, se leía en todo periódico y sitio web….y pues claro, hoy es noticia de todos los días; pero hace 30 años era la primer vez que ocurría semejante fenómeno….

“…los animales al ver la energía y la misión de sus padres arbóreos, gritaban de la contentera y los animaban y acompañaban en el recorrido hasta la parte herida de la montaña, allá, en San Carlos….Miles de aves rodeaban el cielo sobre ellos, augurando positivos resultados….el viento soplaba fuertemente llenando cada rama con vigor rejuvenecido….y los insectos, los pequeñillos, se trepaban en cuanto árbol pudieran pues ellos también iban a defender su hormiguerillo, su bosque.

Yo conocí a Esteban, que era peón de la sucia empresa esa, y él mismo me contó con voz cortada qué fue aquello, que ellos vieron, que pasó ahí…..Cuando llegaron los árboles caminando!!!

Me dijo: “El cielo se puso gris y un fuerte huracán azotó el planeta….Todos gritaban y no dejaba de temblar. Los árboles movían sus raíces como palancas contra el suelo y chocaban sus grandes ramas entre sí provocando un ensordecedor ataque sónico. Jalamos corriendo de ahí como alma que lleva el diablo; y algunos curiosos, como yo, nos quedamos, algo lejos eso sí, escondidos observando….

…y lo que vimos fue sorprendente: los árboles rodeaban toda maquinaria y la envolvían, como araña a su presa! Ese era el primer golpe letal de su ataque; que continuaba cuando el árbol se deshidrataba a sí mismo, se secaba a sí mismo para oxidar los metales del demonio destructor con su savia sabia.

Una vez en tal condición, los cientos de tractores, camiones, excavadoras, y demás; se descomponían bruscamente. Luego, eran el clima y los insectos quienes colaboraban con la causa, pues fuertes lluvias producían toneladas de barro, que eran llevadas a toda trampa-árbol por hormigas, saltamontes, abejones, cigarras, avispas, y miles más….hasta cubrir de barro cada una de las putas máquinas hechas por el hombre.

Y después….., después la estocada final: el sol brilló más que nunca, mi hermano, y pegó con tanta energía sobre el lodo, que lo solidificó, y convirtió todo aquel lugar en un campo de gigantescas rocas de metal-árbol-barro-e-insectos!….”

Al tiempo se cubrió casi todo de maleza y pastizales…, y luego nuevos y fuertes árboles renacían en dichas tierras….” –así terminaba Esteban de contar.

-“El Bosque fue protegido por los árboles!” – festejó el país en aquel tiempo; y aprendió desde entonces a defender su propia Madre Naturaleza, gracias a la lección impartida por los ancestrales y valientes troncos caminantes….”

German Cabrera, junio-2010